Este libro tiene como objetivo demostrar que la poesía argentina contemporánea está atravesada por dos grandes vertientes: el peronismo y el arte pop. Una vertiente es la carencia de la otra, porque arte pop se entiende en la definición de Oscar Masotta como la apelación a los lenguajes y el peronismo, como consigna Oscar Steimberg en el posfacio de Punctum, de Gambarotta, no pudo configurarse como lenguaje.
Cuando señaló que el arte pop apela a los lenguajes, me refiero que en concreto en la poesía argentina, quizá como ninguna otra tradición que conozca, es una poesía de lenguajes, donde el arte, la música, el teatro, la televisión, la historieta, el cine, el psicoanálisis, la lingüística, están muy presentes y la atraviesan. Es una característica singular, que no tiene nada que ver con la poesía en sí, sino con el campo cultural en el que se desarrolla, muy permeable a otras disciplinas: la poesía no solamente entendida como literatura, o mejor dicho como parte de ella pero a la vez como parte de otras disciplinas.
Con el peronismo sucede algo parecido, no se trata de poesía política, a pesar de que lo sea; quiero decir que no se trata de una poesía militante, sino que construye al peronismo como lenguaje, es decir a partir de su carencia.