Ahora bien, más allá de esa estructura general del texto, de su organización y su juego de
resonancias dialécticas, podemos apreciar también que por su textura se despliega como
una segunda piel, de manera transparente, algo que desde ya podemos calificar como una
pregnante experiencia de viaje, algo que envuelve toda la poética de la obra. A todo ello
debemos agregar un estilo directo que descansa en un lenguaje premeditadamente anclado
en la oralidad y en su raigambre cotidiana y hasta coloquial, pues precisamente desde allí se
levantan los textos que van construyendo su propia tela escritural. Quizá por eso, al entrar
de lleno al cuerpo de Trébol, se siente estar en presencia de una auténtica aventura, algo
que ciertamente el poeta nos lo expresa sin recurrir a juegos de palabras ni artificiosidades,
sino precisamente mediante la metáfora de la travesía: “Sobreviviente hasta este minuto /
en tenues clarividencias / vivo todavía la aventura / cuando ese que soy a veces/ da con el
mando de la nave” César Cuadra.
Francisco Greene (Santiago de Chile, 1972). Autor, guionista y creador de contenidos
audiovisuales. Algunos de sus trabajos incluyen las series: Naufragios (2015) e Inmigrantes
(2018). Publicó una plaquette (Haikus en Viaje, 2019), adelanto de un libro en incesante
gestación. Obtuvo la beca de creación literaria del Fondo del Libro y la Lectura en dos
oportunidades. Coautor de un puñado de canciones: Casanova (2004); y una novela gráfica:
Pigafetta (2022), publicada en España y Francia, sobre la primera vuelta al mundo. Ha
vivido y caminado por las ciudades de Santiago, Valparaíso y Vancouver. Actualmente
sigue respirando, radicado en la mawida del sur de Chile, región de La Araucanía. Trébol
(2001) es su primer libro de poesía.
