No se piensa “para” la época sino para escapar de ella y para ventilarla. Spinoza poema del pensamiento nos devuelve al más imprudente de los pensamientos, aquel que piensa “contra” el orden, aquel que se dirige hacia la invención de pensamiento y a la alegría que hace vivir. Es una imprudencia inventiva que exige enfrentarnos al lenguaje, convertirlo en poema.
Lo que Meschonic enseña en su lectura de Spinoza es el valor estratégico de lo que llama marcadores afectivos, operadores cuya potencia es la del trazado del continuo, la invención de relaciones entre afectos y conceptos, la concreción de la unidad ritmada-no de la unión-cuerpo-alma.
Henro Meschonnic nació en Paris en 1932. Murió en Villejuif en 2009. Teórico del lenguaje, ensayista, traductor y poeta. Sus padres fueron judíos rusos que llegaron a Besarabia en 1924. Como linguista enseñó en la Universidad de Lillie de 1963 a 1968, después de 1968 a 1997 en París. Escribió poemas y retradujo la Biblia. Toda su actividad: la del poeta, la del traductor y la del teórico están ligadas y entreveradas en una obra inmensa y diversa. Entre otras: “un golpe bíblico en la filosofía”, “para terminar con la palabra shoah, o La poética como crítica del sentido”, traducido por Hugo Savino. Meschonnic recibió el premio Max Jacob en 1972. Fue miembro de la Aacademia Mallarmé y recibió el premio de Literatura Nathan Katz 2006.